La jardinería durante el invierno
Enero suele ser un mes de letargo para la jardinería en gran parte del hemisferio norte, ya que el suelo suele estar helado y el tiempo en el exterior es demasiado duro para la mayoría de las plantas. Sin embargo, todavía hay algunas actividades paralelas a la jardinería pura que pueden llevarse a cabo en este mes de frío, dependiendo del clima específico y de las condiciones meteorológicas de su zona.
Estas actividades, especialmente adecuadas para el mes de enero, incluyen:
- Planificación del huerto: este es el mejor momento para sentarse alrededor de una mesa y planificar lo que quieres cultivar en tu huerto este año. Puedes investigar diferentes tipos de plantas, hortalizas y flores y crear un esquema específico de dónde se sembrará cada cosa. De este modo, cuando empiece la temporada de cultivo, estará en una posición ventajosa, con la seguridad de no haber extraviado plantas, árboles y cultivos.
- Poda: Algunos árboles y arbustos pueden podarse en enero. Por ejemplo, los frutales de hoja caduca y caducifolios, pero también algunas variedades de rosales, suelen podarse a finales del invierno, cuando están en reposo. La poda puede ayudar a promover un crecimiento sano y mejorar la forma de la planta.
- Limpieza del jardín: Tras la caída de las hojas, es un buen momento para retirar todo el material vegetal muerto del jardín para reducir el riesgo de que invernen plagas y enfermedades. Por "material vegetal muerto" se entiende hojas, ramas rotas y otros restos.
- Prepare las herramientas: el invierno es un buen momento para afilar, engrasar y organizar las herramientas de jardinería antes de que empiece la temporada de cultivo. Sin duda, llevar su excavadora a segar en enero o febrero es la mejor opción, al igual que comprar un nuevo par de orugas de goma, para poder empezar la temporada de trabajo con su equipo en plena forma, habiendo disfrutado además de los descuentos adicionales del invierno.
- Siembra semillas en casa: enero es el momento ideal para sembrar en casa plantas de temporada cálida, como tomates, pimientos y berenjenas. Esto les dará una ventaja y estarán listos para ser trasplantados al exterior cuando el tiempo sea más suave.
- Abonado: Si no es necesario regar el jardín debido a las fuertes lluvias de la estación invernal, conviene comprobar el nivel de agua de las plantas de hoja perenne, los parterres y el césped.
La fertilización del suelo se convierte en la clave para garantizar que disponga de todos los nutrientes necesarios para cuando las plantas vuelvan a crecer. Conviene acolchar la tierra para que el abono se mezcle mejor con el sustrato más profundo, utilizando tipos de abono ricos en potasio y sodio precisamente para fortalecer las plantas.
- Cuidado de los bulbos: enero es el momento de empezar a forzar bulbos, como tulipanes y narcisos, que querrás que florezcan pronto en el interior. Compruebe los bulbos o tubérculos almacenados durante el otoño, como dalias y gladiolos, y deseche los que hayan empezado a pudrirse o muestren signos de enfermedad.
Una vez más, recuerde que los consejos de jardinería pueden variar en función de la ubicación específica y el microclima en cuestión, y siempre es mejor investigar lo que es apropiado y adecuado para su área geográfica específica.